Eugenio Amézquita

En enero de 2012, Acción Social Educativa de Celaya, A.C., Pastoral del Migrante de la Diócesis de Celaya y el Campus Celaya Salvatierra de la Universidad de Guanajuato, apoyan la edición de una sencilla obra descriptiva de lo que es una auténtica joya de la ciudad de Celaya, la imagen en madera de mezquite de la Santísima Virgen María de Guadalupe, que se venera desde hace más de un siglo en su templo del Barrio de Tierras Negras, bastión de la fe sencilla y noble de ese pintoresco y trabajador rinconcito de la ciudad de Celaya.

El autor de esta investigación y realización, lo fue el artista, arquitecto y maestro Arturo Elías Islas, quien además continúa produciendo importantes obras artísticas en la ciudad y varias partes del país.

La Oración a la Virgen de Guadalupe de Tierras Negras

La obra inicia con una aportación fundamental y que da sentido a la obra, la Oración a la Virgen de Guadalupe de Tierras Negras, escrita por quien le ha dado vida con su testimonio y trabajo no sólo espiritual sino también social tanto al Barrio de Tierras Negras sino también en su labor pastoral, encomendada desde hace varios años por los obispos de la Diócesis de Celaya en material de Pastoral de Migrantes, Pastoral del Turismo, que confluyen todas ellas en la Pastoral Social. Hablamos del Pbro. Rogelio Segundo Escobedo, con una trayectoria de más de medio siglo en el trabajo por el bien y salvación de las almas, así como en el bien y dignificación de la persona humana.

La oración dice:

Virgen Santísima de Guadalupe, Madre de Dios y Madre nuestra, tú que en esta bendita imagen nos has manifestado el amor a tu Hijo en la curación a los enfermos en tu casita de Yustis, en ser librada de las almas que incendiaron tu casita.
Tú que tantos años has mantenido la fe de cuantos te invocan,condúcenos hacia tu Hijo Jesús por el camino del Evangelio y haz que acrecentemos una fe que nos comprometa a trabajar por una vida digna para todos. Amén.
Pbro. Rogelio Segundo Escobedo

A manera de prólogo

El entonces rector del Campus Celaya-Salvatierra de la Universidad de Guanajuato, en 2012, Juan Miguel Ramírez Sánchez, escribió a manera de prólogo de esta obra lo siguiente:

"Obras son amores y no buenas razones...", reza el viejo refrán que en esta ocasión, con insistencia y desde perspectivas diversas, viene a mi mente y es que hoy se materializa un propósito que unió en colaboración a instancias de índole religiosa, académica, privada y a particulares, para dar forma a la narración de la historia de la imagen de María de Guadalupe de Tierras Negras, ilustrada con los retablos creados ex profeso por el Maestro Arturo Elías, en los que a la manera como sólo pueden hacerlo los artistas, nos trae de la mano con Laureano desde su salida de San Diego, con su morral al hombro y dentro el icono de su fe: La Guadalupana".

Y prosigue Ramírez Sánchez: "obras son amores... porque en cada lugar al que llega la imagen la fe logra milagros, la tierra se vuelve fértil, el agua de la lluvia que baja por el tejado de la choza sana enfermos, y en el entorno se siente el amor que los pobladores profesan a la madre de Jesús y las obras con las que presienten se corresponde a su fe. Esa fuerza que liga sus almas se vuelca necesariamente en expresiones populares, que combinan la oración, con la danza, con el canto, con la comida y bebida, con la manifestación de unidad de un pueblo que crea y descubre los elementos de su identidad, de aquello que lo une y afirma en sus creencias, tradiciones, valores y costumbres, entre ellas el disfrute del sabor de las gorditas de queso y atole de piloncillo..."

"Obras son amores... porque la Universidad de Guanajuato declara entre la sbuenas razones de sus normas que realiza la tarea de difundir las expresiones de la cultura, y esto fue posible cuando en vinculación con el Padre Rogelio Segundo y las organizaciones de Acción Social y Educativa de Celaya, A.C. y Pastoral del Migrante Diocesana de Celaya, a más de la participación de muchos miembros dela comunidad del Barrio de Tierras negras, entre ellos la séptima generación de Laureano y Guadalupe, que aportaron información para generar el documento por el que se da cuenta de la historia de la Virgen de Guadalupe del Barrio de Tierras Negras".

"Obras son amores... finalmente porque la difusión de lo que somos, la promoción de lo que hacemos y la reconstrucción de los modos desde los que nos hemos forjado nos permiten seguir trabajando día a día con la frente en alto, porque en nuestra historia y cultura tenemos buenas razones para ello".

Ubicación Geosatelital del Templo de Tierras Negras