
Redacción Editorial
-Reyes Carmona, en un acto oportunista, usa tragedia de Carlos Manzo y el sombrero como cínica maniobra de distracción ante la crítica a través de un video
-Facebook le retiró de su cuenta el video por considerarlo spam
-El senador ataca la pluralidad y coalición, principios del Artículo 9°, al descalificar a la oposición que busca unirse a la protesta.
-Doble moral en acción: Reyes se beneficia de la asociación (Morena, PT, PVEM) pero niega ese derecho a la oposición y jóvenes.
-La retórica del Senador criminaliza la unión de la protesta con partidos lícitos; busca aislar y debilitar el movimiento juvenil.
-"Querido amigo" post-mortem: No hay evidencia de que Reyes apoyara o gestionara ayuda para Manzo antes de su asesinato.
-Reyes Carmona comete la hipocresía que denuncia al usar la memoria de Manzo como "mercancía política" para atacar adversarios.
-El discurso impone una "pureza" ideológica imposible; manipula el Artículo 9° al sembrar desconfianza en toda asociación opositora.
-Vulneración discursiva del Art. 9°: Reyes Carmona busca "enfriar" la participación al estigmatizar a los manifestantes y sus aliados.
-Reyes utiliza una táctica dictatorial similar a Cuba o Venezuela: descalificar a toda forma de organización no alineada al régimen.
-La pose del sombrero es una farsa; Reyes carece de legitimidad campesina, como lo descartaron productores de Villagrán.
-Secuestro narrativo: El senador intenta limpiar la imagen de Morena ante un líder disidente asesinado apropiándose de su símbolo.
-Manzo rompió con Morena por fallar a Uruapan; la referencia de Reyes es un eslogan vacío que traiciona la dignidad del alcalde.
-El Senador desconecta con las bases; su discurso evidencia una crisis de credibilidad al usar símbolos que no le pertenecen.
-Reyes busca deslegitimar la protesta al sugerir que solo es legítima si no tiene "agendas" partidistas, un acto antidemocrático.
-Manipulación cínica: El Senador utiliza la plataforma del Estado para limitar la libre voluntad de asociación de la sociedad civil.
El protagónico senador Emmanuel Reyes Carmona (https://www.metronewsmx.com/2025/05/emmanuel-reyes-no-solo-se-cree-heroe.html ) ha emitido un discurso en video -que por cierto Facebook se "lo bajo" de su cuenta por hacer spam- que, más allá de la condena al asesinato de Carlos Manzo, configura una restricción política y moral que ataca directamente la esencia de la libre asociación y reunión de los mexicanos, derechos garantizados por el Artículo 9° Constitucional.
El senador, quien tiene constantes señalamientos por su involucramiento con la agrupación religiosa llamada La Luz del Mundo, a la que el defiende y cuyo líder es el abusador sexual confeso Naasón Joaquín, recientemente ha hecho acto de presencia en ciertos momentos que estratégicamente le conviene para sus intereses políticos en Guanajuato.
El citado video que contiene un monólogo-discurso que fue enviado a los medios de comunicación y que, si bien en un sentido técnico y literal el Senador no ejerce un poder coercitivo para disolver la protesta (no la "viola" físicamente), su discurso sí configura una restricción política y moral que ataca directamente el espíritu y la esencia del derecho de asociación y reunión (Artículo 9°).
La contradicción fundacional del discurso
El argumento del Senador Reyes establece una doble moral política que socava la democracia que dice defender. Señala que "las causas no deben ser capturadas por intereses mezquinos." El Artículo 9° permite asociarse con cualquier objeto lícito, incluyendo el objeto político (reservado a los ciudadanos). Los partidos son asociaciones lícitas con un objeto político fundamental.
En otra parte de su video precisa que "no permitan que su energía sea usada para agendas que no son las suyas." La coalición y la asociación estratégica son mecanismos intrínsecos de la participación política. La libertad implica la decisión de qué agendas adoptar, incluso si son agendas partidistas.
"Hoy vemos a partidos", señala, "y figuras de la oposición que llaman a unirse a la marcha, y no necesariamente para fortalecer la lucha de fondo, sino para usarla con tintes políticos que buscan atacar y dinamitar al estado democrático de derecho". Es un claro mensaje de crítica al PRI, PAN, PRD y don de el senador se le olvidó que el gobierno que el represen en el poder gracias a la asociación y reunión de Morena con otras fuerzas -PT, PVEM, e incluso la alianza histórica con el MC). Su propia existencia política como senador es una consecuencia directa de la asociación permitida por el Artículo 9°.
El ataque de Reyes Carmona al principio de pluralidad y coalición
Cuando el Senador exhorta a la Generación Z a no mezclarse con partidos políticos, está atacando dos principios esenciales que el Artículo 9° tutela y donde el primero es el Derecho a la Coalición. La fortaleza de la protesta social y política reside precisamente en su capacidad de coaligarse con fuerzas diversas para lograr un objetivo. Al estigmatizar a los partidos de oposición, el Senador busca aislar el movimiento juvenil, debilitando su potencial de incidencia.
También el senador Reyes Carmona, en una mustia actitud ataca la pluralidad política. El Artículo 9° protege a todos los grupos lícitos, sean de izquierda, derecha o centro. Al descalificar a las fuerzas políticas nativas (PRI, PAN, PRD, etc.), se está sugiriendo que solo una forma de organización (la que no es oposición) es la legítima, lo cual es profundamente antidemocrático y restrictivo del debate público, muy al estilo de las dictaduras de izquierda del estilo de Cuba, Venezuela y Nicaragua.
La restricción implícita y manipulación cínica
El discurso del Senador Reyes Carmona no es una violación física de la reunión, sino una violación discursiva y manipuladora del derecho constitucional.
Reyes Carmona incurre en un acto de hipocresía política. Él se beneficia de una alianza (la de su partido con el PT y el PVEM) permitida por el Artículo 9°, pero intenta negar ese mismo derecho a las bases ciudadanas o a la oposición.
Reyes Carmona busca imponer una restricción de la voluntad. Su retórica busca imponer una "pureza" ideológica imposible, condenando a priori la decisión libre de los jóvenes de unirse a cualquier actor político lícito.
En esencia, el Senador utiliza la plataforma del Estado para estigmatizar y limitar la libre voluntad de asociación, traicionando el espíritu de apertura y pluralidad que debe garantizar el Artículo 9° de nuestra Constitución.
Reyes Carmona y "la escenita" con el sombrero
En una búsqueda en fuentes abiertas (redes sociales, noticias y videos), esta no arroja evidencia clara de que el senador Emmanuel Reyes (de Morena) haya visitado, apoyado públicamente o intercedido ante la Presidenta de la República a favor del alcalde Carlos Manzo antes de su asesinato.
El análisis de la información disponible indica, en cuanto a las solicitudes de ayuda del alcalde uruapanense, se señala la existencia de numerosos antecedentes de que Carlos Manzo había solicitado ayuda de manera directa y reiterada al Gobierno Federal -nivel de gobierno al que pertenece Emmanuel reyes Carmona-, mencionando específicamente a la entonces Presidenta Claudia Sheinbaum y al Secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, para enfrentar la delincuencia organizada en Uruapan. Estas peticiones públicas, que incluso llegaron a ser transmitidas en vivo, incluían la solicitud de equipo y la permanencia de la Guardia Nacional. No se menciona al senador Reyes como canal de gestión.
La postura del senador Emmanuel Reyes y su participación pública respecto a Carlos Manzo ocurre después del asesinato del alcalde. Sus declaraciones, incluyendo el mensaje que transcribió en su solicitud anterior, se enfocan en lamentar y condenar el crimen; exhortar a que se haga justicia y a criticar a la "oposición" por usar el nombre y la causa de Manzo como "eslogan de coyuntura" o "mercancía política" para fines ajenos a la lucha del alcalde.
Aunque el senador Reyes se refiere a Carlos Manzo como su "querido amigo" en el video, no existe material noticioso ni en redes sociales que documente activamente visitas, gestiones, o apoyo público específico de Reyes hacia Manzo para la defensa de Uruapan o para interceder ante la Presidencia antes de que ocurriera el homicidio.
En resumen, la evidencia pública y mediática muestra que Carlos Manzo buscó el apoyo federal directamente, pero la intervención pública del senador Emmanuel Reyes se enfoca principalmente en la defensa de la memoria del alcalde y en el ataque a sus adversarios políticos tras el crimen.
Reyes Carmona: en la búsqueda de capitalizar una tragedia y deslegitimar protesta social
El discurso del senador Emmanuel Reyes Carmona, bajo la óptica de la crítica política dura, se percibe no como una defensa legítima de principios, sino como un oportunismo estratégico que intenta capitalizar una tragedia y deslegitimar la protesta social, todo ello envuelto en una supuesta preocupación cívica.
El senador no "viola" directamente el derecho de asociación o reunión consagrado en el Artículo 9° pero su retórica busca desincentivar el ejercicio del derecho al introducir un elemento de desconfianza y estigmatización.
Al afirmar que la marcha está siendo "capturada" por "intereses mezquinos" y la "oposición", el senador intenta despojar a los participantes de la legitimidad de su causa, sembrando la duda de que la protesta es un mero acto político-partidista, actitud semejante a la empleada por la presidenta de la república Claudia Sheinbaum (https://elpais.com/mexico/2025-11-12/sheinbaum-blinda-palacio-nacional-y-se-lanza-contra-la-manifestacion-de-la-generacion-z-ni-a-chavorrucos-llegan.html ) y el alcalde de Celaya, Juan Miguel Ramírez Sánchez (https://oem.com.mx/elsoldelbajio/local/alcalde-de-celaya-rechaza-convocatoria-de-la-generacion-z-y-la-califica-como-oportunismo-politico-26720357).
Esta táctica discursiva cumple una función de "enfriamiento" de la participación ciudadana, desmovilizando a aquellos que temen ser asociados con una agenda "ilegitima" o "política barata". En este sentido, manipula el espíritu del Artículo 9° al imponer un juicio de intencionalidad sobre el objeto lícito de la reunión.
El sombrero y la hipocresía del "Querido Amigo"
El gesto es un cínico acto protagonista sin sustento ni credibilidad. El hecho de que no exista evidencia pública de apoyo, gestión o defensa previa del senador Reyes a favor de Carlos Manzo o del movimiento de "El Sombrero" anula instantáneamente la credibilidad de su supuesto "luto" y "amistad".
Como se constató, Manzo buscó el apoyo federal directamente, sin ser canalizado o defendido por su supuesto "querido amigo" del mismo partido. La amistad, en política, se demuestra con gestiones y apoyo en vida, no con la retórica post-mortem.
El senador Reyes critica que otros usen la tragedia como "mercancía política", pero su propio discurso, al criticar a la oposición mientras reivindica la figura de Manzo y utiliza el símbolo del sombrero, es el ejemplo perfecto del oportunismo que denuncia. Su acción se convierte en un intento de secuestro narrativo para limpiar la imagen de su partido (Morena) ante un líder disidente asesinado.
La referencia a Manzo es un mero eslogan de lealtad partidista y un intento tardío y vacío de apropiarse de la dignidad de un hombre que, al romper lazos con Morena, demostró que los intereses del partido fallaron a su pueblo.
La utilización del sombrero, símbolo que el senador Reyes emplea para intentar identificarse con el movimiento de Carlos Manzo y, por extensión, con las bases campesinas, es una pose vacía e hipócrita que se desploma bajo el escrutinio de los hechos y la prensa local.
El gesto del senador de Morena no solo es un oportunismo tardío ante una tragedia ajena, sino que se convierte en una burla a la autenticidad cuando se recuerdan las acusaciones documentadas.
Metro News, en su publicación del 28 de octubre de 2025 (https://www.metronewsmx.com/2025/10/el-senador-morenista-emmanuel-reyes.html ), reveló que productores agrícolas del municipio de Villagrán -municipio donde es oriundo y su esposa es la alcaldesa Cinthia Teniente- lo descartaron enfáticamente de ser un defensor genuino del campesinado o de preocuparse por las causas agrícolas y sociales. Esta denuncia periodística, pública en la web, demuestra que el Senador carece de la legitimidad de origen para portar un símbolo tan poderoso como el sombrero. (https://www.metronewsmx.com/2025/10/emmanuel-reyes-senador-y-oriundo-de.html )
En conclusión, el acto del senador Reyes de invocar la figura de Manzo con un sombrero en la mano no es un acto de luto o unidad, sino una maniobra de distracción patética. Intenta manipular la simbología campesina para camuflar la desconexión con sus propias bases, al tiempo que ataca a otros por el oportunismo que él mismo encarna.
El uso de ese símbolo no le queda ni le va, y solo subraya una profunda crisis de identidad y credibilidad política. La pose del senador Emmanuel Reyes con el sombrero, en el contexto de la crítica a la "mercancía política" y la supuesta "amistad" con Carlos Manzo, es un acto de cinismo que alcanza su máxima expresión al contrastarlo con las acusaciones de los campesinos de su propio municipio.
El gesto, en lugar de generar unidad, subraya una profunda crisis de identidad y credibilidad en su representación popular, exhibiendo su intento de manipular los símbolos del campesinado para fines estrictamente electorales o de coyuntura.
Transcripción del oportunista mensaje de Emmanuel Reyes
Emmanuel Reyes Carmona:
En los últimos días hemos visto a la generación Z salir a las calles y organizarse. Por ello quiero iniciar reconociendo algo fundamental: su derecho a expresarse y a participar en la vida pública es incuestionable y está protegido en nuestra Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. El artículo sexto reconoce la libertad de expresión, el derecho de toda persona a manifestar sus ideas.
El artículo noveno garantiza el derecho de asociarse o reunirse pacíficamente con cualquier objeto lícito. Eso incluye la organización juvenil, la protesta social y la participación política activa. Desde esa base jurídica quiero decirlo con toda claridad: las y los jóvenes que hoy marchan y marcharán están ejerciendo sus derechos fundamentales, no están haciendo nada indebido. Su voz es necesaria porque su participación fortalece la democracia y su mirada crítica es indispensable para seguir transformando al país.
Como representante popular es mi deber señalar que la democracia es más fuerte cuando la ciudadanía ejerce sus derechos con libertad, pero sin permitir que intereses mezquinos intenten capturar sus causas. Hoy vemos a partidos y figuras de la oposición que llaman a unirse a la marcha, y no necesariamente para fortalecer la lucha de fondo, sino para usarla con tintes políticos que buscan atacar y dinamitar al estado democrático de derecho.
Y aquí quiero ser muy concreto: en días recientes el tema de mi querido amigo Carlos Manso ha sido utilizado por varias voces que se han aprovechado de su lucha y de lo que él representaba cuando ni siquiera lo conocieron. Muestra de ello es el pronunciamiento de su viuda, la presidenta municipal de Uruapan y única líder del movimiento del sombrero, Grecia Quiroz, la cual ha dejado en claro que se deslinda de esa movilización, argumentando que el movimiento del sombrero no participará, y cuyo origen es y será desde Uruapan, Michoacán, para todo el territorio nacional. Por lo cual, exhorto a toda aquella persona que quiera participar activamente en el movimiento del sombrero lo haga a través de los canales y medios oficiales. Con ello se evitará que los oportunistas saquen raja política de alguien que sacrificó su vida por la justicia y también por sus ideales.
Bajo esta tesitura quiero invitarles a una reflexión: el Estado no es enemigo de la libertad. Al contrario, es quien ha construido a lo largo de décadas un país democrático donde ustedes pueden marchar, exigir, protestar y elevar su voz sin miedo. Respetar a las instituciones no significa renunciar a la crítica, sino reconocer que sin ellas no habría país que defender ni justicia que reclamar. Utilizar el nombre de Carlos Manso solo como eslogan de coyuntura es reducir su causa a una simple consigna política de simulación. Porque las causas, cuando son genuinas, se hacen desde la libertad, porque la libertad no se delega, la dignidad no se presta, el dolor de un país no es mercancía.
Su fuerza es auténtica cuando responde a sus propias convicciones, no a los intereses de quienes en cada protesta ven a una campaña política. Cuestionar a las instituciones es legítimo, exigir que funcionen es legítimo. Llamar a destruirlas, debilitarlas o incendiarlas no es un acto democrático. A la verdadera generación Z le digo: sigan participando, sigan organizándose, sigan cuestionando. Tienen todo el derecho a inconformarse y a proponer o a exigir cuentas.
Pero al mismo tiempo les recuerdo que la participación política no se agota en las marchas ni en las consignas de un día. También toman vida cuando trabajamos con honestidad y empeño, cuando nos organizamos en nuestros barrios, cuando debatimos con argumentos, cuando exigimos transparencia, cuando votamos informados y cuando presentamos propuestas para mejorar nuestras leyes y nuestras comunidades. Cada ciudadano que se involucra, que opina, que construye y que asume su responsabilidad pública está ejerciendo una forma poderosa y legítima de manifestación política.
Por ello les pido que no permitan que nadie convierta sus causas legítimas ni el nombre de Carlos Manso en simple mercancía política. No permitan que su energía sea usada para agendas que no son las suyas. Cuenten con mi respaldo, con mi respeto a sus derechos, con mi disposición a escuchar y a dialogar, y con mi voz firme para evidenciar a quienes intentan aprovecharse de su lucha para querer hacer lo mismo de siempre: política barata. Sigan construyendo juntas y juntos un México donde la fuerza de la juventud sea motor de justicia social, no herramienta de manipulación, y donde las causas de fondo se atiendan con seriedad y con instituciones fuertes y además con auténtica responsabilidad de Estado. ¡Viva por siempre Carlos Manso! #MetroNewsMx
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